Tarwater

Tarwater

es un grupo alemán que si bien la música que crean tiene influencias de diversos grupos electrónicos, su forma de mezclar los beats rígidos con melodías (humanas), los convierten en una banda singular, distinguiéndose de los demás por su talento y precisión para crear atmósferas sombrías y bailables. A pesar de que cada canción de Tarwater es un mundo diferente (algunos poblados por extraterrestres, otros por seres humanos), al conjunto oriundo de Berlín se lo puede caracterizar con dos estilos: Siempre apoyados por una instrumentación rigurosa y “fría”, los germanos se meten en las partes más oscuras de la mente humana, así como también pretenden distender. El costado tenebroso de los alemanes tiene como cualidad una profundidad hipnótica, un recorrido sinuoso por callejones sin salidas y difusos. Muestra de estos estados de conciencia son sus primeros discos (“Not the Wheel”- “Silur”), los cuales están plagados de temas contemplativos y misteriosos. Por otra parte, cuando Tarwater deja que la luz (artificial) entre a sus composiciones, obtiene como resultado canciones pop muy finas y melodiosas. Muchas de ellas parecieran provenir de una incierta pista de baile, en la cual seres de otros planetas bailan al ritmo de los beats. Su anteúltimo disco (“The needle was travelling”) da rienda suelta a temas más soleados, que con un poco de simpatía invitan a bailar. Una danza algo estática, es verdad…pero muy disfrutable.

Tarwater es quizás la banda que mejor provecho le saca a la fusión electro-pop. En ellos no se hallará temas para subir el volumen y jugar a ser un “drogui-dancer” al compás de las pastillas, pero sí se experimentará sensaciones indescriptibles al escuchar sus canciones más “alegres” con el solcito en la cara, con el frío rondando, y dejándose llevar por los intentos de una banda que pareciera tener sangre azul…especies intentando sentir…sonidos tratando de derretir muñecos de nieve….Más allá del resultado final, el intento de por sí es emotivo.